F.G. Turín desde Superga. El Día. 05.2023.
Instalado al borde del abismo permanece reclinado y ajeno a todo lo que le rodea, distraido con cualquier cosita que le aportan los estímulos lejanos del juguetito, ahora por aquí y ahora por allá, indiferente al perentorio barranco que oye bramar y siente cómo medra a su espalda.
F.G. Turín desde Superga. El Crepúsculo. 05.2023. |
¡Qué mirada!
ResponderEliminarLa tuya.
Tenía yo en el bachillerato un profesor de historia del arte (bastante fascista, hablando con propiedad y sin exagerar) que se deleitaba en este tipo de comentarios, acompañados casi siempre de sorbidas de mocos espectaculares, expresionistas.Todo muy realismo sucio.
ResponderEliminarSucio como sus dientes podridos; como su turbia mirada; como su pelo, abrillantado y casposo simultáneamente; como su hábito falangista acharolado por la mugre acumulada; como sus manos de color amarillo camel presididas por las corvas uñas de los meñiques con las que buscaba donde había y sabía encontrar; como su mente sádica de irredento redentor. Eran unas clases muy entretenidas, más para la etología que para la cultura general.
ResponderEliminar