lunes, 24 de septiembre de 2018

"¿Sadomaso?"

 José de Ribera "El Españoleto". Martirio de San Bartolomé. 1644.

La verdad es que llama la atención el furibundo escándalo (incluida la fulminante dimisión del director de la en tantos sentidos admirable Fundación Serralves) que ha provocado en la ciudad de Oporto la exhibición de unas cuantas fotografías de asunto sadomasoquista realizadas por Robert Mapplethorpe hace ya cuarenta años. 
Caravaggio. Martirio de San Pedro. 1601.
Nuestros templos y nuestros museos, por no salir del orbe cristiano, están llenos de imágenes "chocantes", morbosas y sexualmente explícitas, encargadas a lo largo de siglos por los poderes civiles y religiosos  a los mejores artistas de cada época (que también, como Mapplethorpe, solían recurrir a la gente de su entorno afectivo y a sí mismos como modelos) para conmover y provocar la meditación, para hacer más sensibles y piadosos a los espectadores, creyentes o no.
Juan de Juni. Martirio de San Sebastián. Circa 1540.
¿Somos más vulnerables ahora que hace cuatro siglos a esos estímulos, e incapaces de establecer distancia y un juicio propio? ¿Nos consideran las autoridades débiles sin criterio y desvalidos a proteger, y actúan en consecuencia, responsablemente, "por nuestro bien"? ¿Ha cambiado la función del arte y ya no se espera de él otra cosa que beneficio económico, prestigio social, brillo, confortable muermo y apaciguamiento de conciencias?
Bronzino. Detalle del martirio de San Lorenzo, en la Basilica de San Lorenzo, en Florencia. 1569.
Quizá el problema esté en la mirada enferma del  escandalizado, del censor.
O quizá no les gusta el cuero negro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario