Boceto de escenografía encontrado donde menos se le esperaba

Atento a las cambiantes necesidades de la representación, adaptado a tan singular espacio escénico, funcional y versátil, elástico, hermoso, inquietante y acogedor, sombrío y luminoso a la vez, artesanal, ligero, barato, duradero, autoportante, reciclable, perfectamente dibujado, fácilmente desmontable,... ¿Qué más se le puede pedir a un punto de partida?
Menuda telaraña!
ResponderEliminarLo que añade la mirada del artista. Gracias por enseñárnoslo.
Pues si mí me recuerda una muy sugerente pintura sobre el origen del mundo.
ResponderEliminarMe gustaría ver la función. Seguro que es interesante.
ResponderEliminarRealismo sucio
ResponderEliminarRastro de una contienda o comecocos?
ResponderEliminar¡Vaya tela!
ResponderEliminar