Un lema acompañó durante su larga vida al insumiso Walt Whitman: “Resiste mucho. Obedece poco".
Sin duda es una buena manera de fortalecer el carácter individual, aunque el poeta vió también en esa máxima su dimensión social y política y la difundió como una advertencia de utilidad pública:
Walt Whitman. El poema en la edición de 1871 de Hojas de hierba. |
"A los Estados o a cualquiera de ellos, o a cualquier ciudad de los Estados. Resistid mucho, obedeced poco,
Cuando la obediencia es incuestionable, cuando la servidumbre es completa,
Ninguna nación, estado o ciudad de este mundo, recobran jamás la libertad”.
A buen entendedor, cuatro palabras le bastan. Especialmente en tiempos de servidumbres voluntarias.
Walt Whitman en 1881. Biblioteca del Congreso de los EE.UU. |
Algunos textos parecen escritos la mañana del día en que los leemos.
ResponderEliminarEl asombro de la gran literatura.