Andy Warhol. Portada para un disco de John Cale. The Academy in peril. 1972. (La parte posterior también eran diapositivas)
La diapositiva, llamada también, según dónde y por quién, transparencia, transpariencia, filmina, filimina, diapo, diá o eslaid (por no salir del ámbito castellano y en el limitado marco, esencialmente estático, de mi sedentaria biografía), es una fotografía positiva creada en cristal o en otro soporte transparente por medios fotoquímicos.
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F.G. Mesa de luz con diapositivas en una exposición de Miguel Trillo en la Tabacalera de Madrid. 11.2014. |
Heredera lejana del autocromo, de la mano de la familia Eastman (alguno de cuyos miembros llegó a casarse con Paul McCartney) y a través del procedimiento Kodachrome (al que cantó con la inspiración habitual Paul Simon) consiguió tener unos bonitos y nítidos colores que a menudo aguapaban la realidad, por lo que, tan fotogénica, hizo carrera cinematográfica a la vez que se extendía triunfante y con promesas de perdurabilidad en el ámbito doméstico.
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Luis Poirot. El fotógrafo Agustí Centelles organizando sus fotos, transportadas a diapositivas. |
La película positiva de las diapositivas estaba contenida en un marquito de plástico o cartón, que necesitaba para verse en condiciones razonables unos cuantos artilugios que enriquecieron nuestro vocabulario y llenaron aulas y casas de trastos: proyectores, pantallas, carros, cajetines, carruseles, merienda para los amigos después de cada viaje, etc.
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Alfredo Jaar. El silencio de Ndeuvvayezu. 1997. |
Parecía que la suerte estaba echada a su favor y para siempre, hasta que llegó “lo digital” y la barrió del mapa. |
Dios, o quien proceda, te oiga!
ResponderEliminarPues, sabiendo que es posible, habrá que ponerse a ello cuanto antes..
ResponderEliminarTienen las horas contadas.
ResponderEliminar(Aunque no sé si son muchas o pocas, la verdad).