martes, 30 de junio de 2015

La tormenta perfecta

F.G. Y dicen que el pescado es caro. 27.06.2015.
El ojo del huracán no pasa de ser, demasiado a menudo, un ojo de besugo.
F.G. Casi nada lo del ojo. 27.06.2015.

lunes, 29 de junio de 2015

"San Ginés: el que tiene cara de burro...

August von Mackensen. Circa 1915.

...lo es".
Por si el rostro no dijera bastante acerca de las cualidades morales de las personas, estas suelen recurrir al hábito y el tocado para completar su declaración de principios e intenciones.

General feldmarschall August von Mackensen. Circa 1920.
A buen entendedor...

Esta es la séptima entrega de la serie Los Refranes.
(Ponte al día repasando las entradas Primera , Segunda , Tercera , Cuarta, Quinta y Sexta)
(Continuará, probablemente)

viernes, 26 de junio de 2015

Postrimerías

F.G. Solsticio de verano en la sierra de Cantabria.  21‎ de ‎junio‎ de ‎2015..
Hasta el día más largo tiene su ocaso.

F.G. Solsticio de verano en el valle.  ‎21‎ de ‎junio‎ de ‎2015, a las ‏‎21:49:20.

jueves, 25 de junio de 2015

Cuaderno de tareas para vacaciones de verano

David Hockney. Piscina. 1966.

“Clasicismo. Sólo hay originalidad verdadera cuando se está dentro de una tradición Todo lo que no es Tradición, es plagio.”

“Nada hay tan moderno como lo que no debe cambiarse.”

“La excepción arquetípica se llama genio. La excepción solitaria se llama monstruo. El gusto es el genio socializado.”

David Hockney. Bañista. 1966.

“Haz el bien, como quien canta naturalmente cuando anda solitario a través de un bosque”

“¡Bienaventurada la tarea en que se puede cantar!”

“´Más valen canciones que razones´, dice nuestro adagio. Dichosa, empero, la humanidad el día en que entre (yo espero que ha de entrar) en situación de espíritu tal, que las canciones sean todas razonables, y todas las razones, cancioneras.”


David Hockney. Piscina con dos figuras. 1967.


“Todo el honor, toda la libertad, para quien crea. Toda restricción, toda humillación, para quien especula.”

“No seguir la opinión. Precederla. Fabricarla.”

“Entre dos explicaciones elige la más clara. Entre dos formas, la más elemental. Entre dos palabras, la más fuerte.”

“A pie, a pie conviene ir. En todo. En los paseos, en los oficios, en el amor, en el estudio. En el estudio sobre todo. Único modo de evitar que el saber, con envanecer, desvanezca.”


David Hockney. Piscina. 1980.

“¿Conciencia tranquila? No te fíes de agua que no corra.”

“Todos los perfumes evaporados tienen un nombre: Melancolía.”

“Todo pasa. Pasan pompas y vanidades. Pasa la nombradía como la oscuridad. Nada quedará en fin de cuentas. De lo que hoy es la dulzura o el dolor de tus horas, su fatiga o su  satisfacción, una sola cosa te será contada y es tu obra bien hecha”.
David Hockney. Gregory en la piscina.

Este florilegio de aforismos es obra de Eugenio d´Ors, uno de los principales cultivadores de tal género en España, y proceden del libro 100 aforismos ilustrados, cuidado por Carlos d´Ors para la editorial Casariego, de Madrid (2005).
Materia abundante y de categoría para ocupar la mente e ir preparándose para el otoño, que llega enseguida y parece que vendrá intenso y cargadito de emociones.
David Hockney. Una gran zambullida. 1967.
El que avisa no es traidor.

miércoles, 24 de junio de 2015

El viento y la codicia (una de miedo)


Wilhelm Staehle. The wind.

A veces "el viento" te deja helado, o te apuñala, como el asesino en serie de esta peliculita de miedo de nuestro recortador preferido, Wilhelm Staehle.
El País. 18.06.2015.


Demasiado a menudo las noticias tienen las mismas consecuencias: en mitad del empobrecimiento generalizado de la población española nos enteramos de que ha aumentado la cantidad de ricos como nunca. 
Lo que parecía un efecto colateral se descubre como el objetivo estratégico de la mal llamada crisis. 
Esto es jauja. 
 
Juan Pablo Echeverri. Famoustros. 2012.


Y luego se asombran de que, según el barómetro del C.I.S., siete de cada diez ciudadanos estén poco o nada satisfechos con el funcionamiento de la democracia en España.


martes, 23 de junio de 2015

Óscar Cenzano: el oficio del artista

Óscar Cenzano en la Sala Tondón, de Briñas. 20.06.15. Foto Carlos Rosales.
Óscar Cenzano ha respondido a la invitación de la comisaria Isabel Krug preparando para la  sala Tondón, de Briñas, una exposición singular en la que, exigido por las características estructurales del lugar, ha optado por piezas de mediano formato, colgadas y esencialmente bidimensionales.
El rígido corsé del pequeño espacio quebrado ha funcionado como exigente estímulo y le ha servido de acicate para reactivar sus abundantes recursos artísticos y su mucho oficio, resolviendo el envite de manera creativa y sin renunciar a lo que considera definitorio en su trayectoria: la aspiración tridimensional de su trabajo de escultor.
Óscar Cenzano. Dos "tiempos de cata" en la Sala Tondón, de Briñas. Foto Carlos Rosales.
Ha creado cuatro obras (“tiempos de cata”) caracterizadas por el estudio de las variaciones cíclicas en el paisaje riojano, reflejadas en su mudable morfología, su cambiante y matizado colorido y la rica diversidad volumétrica que lo hace extraordinario, a la vez dinámico y sosegado.
Para realizarlas ha recurrido, como en otras ocasiones anteriores, a la utilización de materiales procedentes de toneles y barricas usados en la elaboración de vino (duelas y durmientes) de los que aprovecha su inicial preformado con la suave curva cóncavo-convexa, y el precioso color aportado por el tostado inicial de la madera y las tonalidades y cristalizaciones añadidas por la crianza, a las que luego agrega el color definitivo a partir de tintes y ceras naturales. Esos
cálidos materiales, una vez ensamblados, los articula y rigidiza con piezas de fuselajes aeronáuticos, a modo de fleje.
Óscar Cenzano. "Tiempo de cata" en la Sala Tondón, de Briñas. Foto Carlos Rosales.
El resultado final son cuatro sofisticadas esculturas que -por la perfección de su cuidada elaboración y la seductora incitación que provocan al tacto y a la vista del espectador- parecieran provenir del taller de un joyero, o de un hipertecnológico laboratorio de producción de prototipos industriales. Incluso de un imaginario museo etnográfico en el que se recogieran las bellas herramientas agrícolas del pasado de una civilización de artistas.
Óscar Cenzano. "Tiempo de cata" en la Sala Tondón, de Briñas. Foto Carlos Rosales.
Y todo eso, aunque colgado de un muro o del techo, exhibiendo orgullosamente su condición de esculturas, sin renunciar a ocupar el espacio y apoderándose de él, añadiendo además una posibilidad más atractiva por inusual, una dimensión “volátil”, como de compleja  lengüeta de instrumento que se va a poner a vibrar y a sonar en cualquier momento, por influjo del viento o de la acción humana: el artista convertido en caprichoso luthier.
Óscar Cenzano. Detalle de "tiempo de cata". Foto Carlos Rosales.
El trabajo –tan personal- de Óscar Cenzano, siempre me ha recordado al de otros artistas con los que comparte intención y el gusto por ciertos materiales (Moisés Villèlia muy especialmente, pero también Lucio Muñoz), y, a veces, la dimensión “orgánica” de Ángel Ferrant y, más sorprendentemente, la voluntad y presencia “ecológica” de algunas obras de Adolfo Schlosser.
Óscar Cenzano. Detalle de "tiempo de cata". Foto F.G.
Óscar Cenzano. Detalle de "tiempo de cata". Foto F.G.

Óscar Cenzano. Detalle de "tiempo de cata". Foto F.G.


Óscar Cenzano. Detalle de "tiempo de cata". Foto Carlos Rosales.

Las estupendas fotografías que, tan gentil como siempre, ha facilitado Carlos Rosales para acompañar esta crónica, hablan por sí solas y con toda claridad de los méritos de la exposición de Óscar Cenzano, pero la experiencia del disfrute de la escultura en el espacio para el que ha sido concebida es personal e intransferible. 
Así que ya saben: hagan plan de ir cuanto antes a Briñas, y a ver si tienen suerte y se encuentran con Óscar, que tiene mucho que contar y que enseñar. 
Óscar Cenzano. Detalle de un "tiempo de cata" con el soto del Ebro en Briñas reflejado. Foto Carlos Rosales.



lunes, 22 de junio de 2015

Joan Manuel Serrat: patrimonio (supra)nacional


Joan Manuel Serrat en Logroño. 18.06.15. Foto de Frank Blurred.
Hemos disfrutado en Logroño de dos horas de la gira mundial con la que Joan Manuel Serrat está celebrando sus primeros cincuenta años sobre los escenarios. Y las hemos vivido como se goza de un delicado patrimonio que se siente a la vez como propio y común, con cariño, con atención, con cuidado por su estado de conservación. Como quien recibe a un amigo querido, inteligente y perspicaz que pasa de vez en cuando por aquí para contarnos sus cosas, que, en buena medida, son también las nuestras.  Lo extraordinario del caso es que algo así se siente en cualquier lugar, en todas partes, más allá de las fronteras, y que afecta a muchos de los que nos expresamos en castellano o en catalán.
Serrat en 1965. Portada de disco diseñada por Jordi Fornas.
Nos propuso de entrada “invertir una noche de nuestra vida” compartiéndola con su música, y planteó la ceremonia como una “antología desordenada” (aunque solo lo es en el nombre), para la que seleccionó su repertorio más íntimamente sentido como propio pero sin desatender al más popular, a los grandes éxitos que se han ido convirtiendo en himnos de identificación -por consenso, como debe ser- para varias generaciones. 
Serrat en 1975. Fotografía de Colita.
Siempre ha sido un excelente narrador, y, además de lo que nos cantó, nos contó historias llenas de sensibilidad y valor civil, que tienen que ver con la solidaridad y la alegría de vivir, con el goce de lo cotidiano apurado como algo extraordinario. Sabe, como pocos, despertar atención y generar interés expectante, y lo aprovechó para hablarnos, entre otras cosas, del papel social de las canciones (que en los mejores casos nos acompañan de la cuna a la tumba), de los niños que viven y mueren en la calle, de las virtudes de la siesta y la utilidad práctica del contradictorio refranero, de las excelencias de su profesión (en la que se divierte, se siente realizado como persona, querido por un montón de gente y bien pagado), y de las cualidades salutíferas de la poesía de Antonio Machado y de Miguel Hernández.
Ray Ferrer, David Palau, Ricard Miralles, Joan Manuel Serrat, Kitflus y Vicente Climent en Logroño, el 18.06.15. Foto de Frank Blurred.
A pesar de que el “imponente marco”, tan frío por su desmesurada extensión y distancia, no  propiciaba la emotividad que facilita la proximidad de un teatro, Serrat venció todas las dificultades y mantuvo en vilo al público sirviéndose de una impecable producción (un sonido perfecto y una iluminación espectacular muy acertada) y, muy especialmente, de un grupo de excelentes músicos al servicio de los brillantes arreglos del maestro Ricard Miralles, que ha mantenido la sobriedad básica de las canciones pero potenciando sus cualidades líricas  a través de la imaginación que aportan intérpretes tan aguerridos y versátiles como los que le acompañan. Los arreglos orquestales creaban fondos sinfónicos tan eficaces y coloristas como poco ampulosos, arropando perfectamente las necesidades del cantante y dejando abundantes espacios para los virtuosos primeros planos de los solistas. Chocaron, por inauditos, algunos cambios de tempo, y por allí sonó un sorprendente mariachi, un minué trotón y unas cuantas aproximaciones a la música andaluza. 
Seguramente no es el momento, pero hay que aprovechar la oportunidad, aunque sea de paso, para señalar lo bien que ha elegido siempre Serrat a sus arreglistas: pocas discografías resultan en conjunto tan atemporales e incombustibles como la suya, por encima de las modas pasajeras. Otro rasgo de genio, el saber rodearse de los mejores.
Joan Manuel Serrat en Logroño. 18.06.15. Foto de Frank Blurred.
Nuestro visitante demostró que está en buena forma, con las lógicas marcas que nos va dejando la vida. Administró con tino su voz, con su característico vibrato, modulando y ajustando (a la baja) el tono en algunas ocasiones, pero con la misma capacidad de comunicar y emocionar que siempre. Sigue siendo un maestro del movimiento escénico, con un amplio abanico de recursos entre los que resultan especialmente simpáticos los guiños a la comedia antigua y al cine mudo, y es admirable su facilidad para colocarse en el centro de la broma, protagonizando sus humoradas sobre la vejez o aplicándose los clichés que se atribuyen a sus paisanos.
Joan Manuel Serrat en Logroño. 18.06.15. Foto de Frank Blurred.
El concierto, tan bien planteado, resultó una gozada para el público que llenó el auditorio, la mayor parte viejos conocidos que tienen entre los mejores recuerdos de su educación sentimental algunas de sus canciones y sus conciertos, pero también, afortunadamente, bastante gente joven que aprendió ese prodigioso repertorio en el coche de sus padres, y unos cuantos niños –dichosos ellos- que empiezan muy pronto y muy bien a cultivar el amor por las buenas canciones.
Joan Manuel Serrat en Logroño. 18.06.15. Foto de Frank Blurred.
Hasta aquí la crónica de lo mucho que dio de sí la visita de este amigo locuaz que, afortunadamente (y por eso lo hemos hecho amigo y lo queremos tanto), suele tener razón y se da tan poca importancia. Gracias por haber contado con nosotros y habernos hecho un hueco en tan sonada conmemoración, y vuelve cuando quieras, porque estás en tu casa. 
Ojalá sigas haciendo camino durante mucho tiempo.

Joan Manuel Serrat
"Antología desordenada"
Riojaforum. Logroño
18 de junio de 2015



viernes, 19 de junio de 2015

Ventriloquia


Los ventrílocuos son profesionales de la falsificación. Imitan voces de personas y fingen situaciones sirviéndose para el paripé de un reclamo con traza de muñeco más o menos articulado, a veces tan conseguido que se aprecia en el cacho de madera cierta capacidad para la mueca (aunque, en cualquier caso, carece de la más elemental autonomía -a pesar de las apariencias- y de alma expresiva, como resulta evidente en sus actos maquinales).
Cuando la representación está controlada y sigue los cauces previstos en el guión del espectáculo, los papeles están repartidos y la discreción se valora como un mérito esencial. Pero en las épocas turbulentas (¿y qué época no lo es, si nos fijamos bien?) el imitador acaba por perder finezza (si alguna vez la tuvo) y en su tosco nerviosismo acaban por adivinarse el truco, los latiguillos y el acento. El muñeco, entonces, está perdido.
Es en esas situaciones de crisis cuando se descubre que el aparente diálogo entre objeto y factotum no es tal, y que no pasa de ser la transmisión cacofónica de un monólogo disociado.
En esa dualidad el dominante (apreciable siempre por su mayor tamaño y porque, cuando quiere, ejerce su autoridad y mete sin remisión al supuesto antagonista en la maleta) habla con el vientre con virtuosismo desigual, mientras que el bulto acoplado no pasa de ser un estómago agradecido, más o menos vistoso pero sumiso por naturaleza.
La ventriloquia es un juego cruel en el que los esquizofrénicos parten siempre con ventaja.

jueves, 18 de junio de 2015

Et in Arcadia ego

F.G. Virgilio en el balcón. 06.2015. Madrid.
En el Paseo del Prado de Madrid, frente al Jardín Botánico y justo a la vuelta del jardín vertical que Patrick Blanc diseñó para Caixaforum, se puede ver este precioso panorama.
F.G. La morada de Virgilio. 06.2015. Madrid.
El paraíso también está en las pequeñas cosas, y a nuestro alcance.

miércoles, 17 de junio de 2015

Castillo de naipes

Yuri Avvakumov. Catapultower. 1982-2007.
Las cosas bajan como suben, pero mucho más deprisa y de manera todavía más desordenada.
Yuri Avvakumov. Catapultower. 1982-2007.
Como si las partes hubieran interiorizado el alarmante "sálvese quien pueda", que, por una vez, pesa tanto o más que el primordial "tente mientras cobro".
Yuri Avvakumov. Catapultower. 1982-2007.

martes, 16 de junio de 2015

¿Cómo sonaba Gotinga en 1792?


Figura de Lichtenberg. Gyorgy Kepes. 1951.
"Una hermosa tarde de primavera de 1792, estando yo en la ventana que da a mi jardín, situado a unos 2.000 pies de distancia de la ciudad, me entró curiosidad de oír lo que desde la famosa Gotinga pudiera llegar a mis oídos, y esto fue:
Figura de Lichtenberg.

1) el rumor del agua en el gran molino,
2) el ruido de unos cuantos carros o carruajes que pasaban,
3) un griterío muy vivo y persistente de niños que, probablemente, estaban cazando abejorros en el bastión,
4) ladridos de perros a diferentes distancias y en una amplia gama de registros sonoros y afectivos,
5) tres o cuatro ruiseñores en los jardines aledaños o en la ciudad,
6) innumerables ranas,
7) un retintín de bolos que entrechocaban, y
8) una especie de corno mal soplado que era lo más desagradable de todo."

G.Ch, Lichtenberg. Aforismos. Cuaderno J. Traducción de Juan del Solar. Edhasa, 1991.
Figura de Lichtenberg. Mike Walker.


Tan adelantado en tantas cosas, el bueno de Lichtenberg elaboró hace más de doscientos años el "mapa sonoro" de su casa en el campo, y, como de paso, una ajustada evaluación del interés relativo de los sonidos de la naturaleza frente a la pretendida música.


lunes, 15 de junio de 2015

No desesperes


Paul Strand. Nunca pierdas la esperanza. Terminal de autobuses de Accra. Ghana.
El  sol sale todos los días.
Pero, como decía Lichtenberg, "De qué sirven todas las salidas del Sol si no nos levantamos."

Ana Nance. Ushuala. Tierra de Fuego. Argentina.
Cuanto antes, -¡ya!-, arriba los corazones.
No desesperes.











viernes, 12 de junio de 2015

Elegir

Richard Avedon. Sesión fotográfica con Marilyn Monroe. Nueva York, 6 de mayo de 1957.

Ser grande es atreverse a elegir, y acertar contra las apariencias.

Richard Avedon. Marilyn Monroe. 1957.



Caída la máscara, agotada al final de una extenuante sesión,la cautivadora estrella deja por un momento al descubierto toda su fragilidad, su profunda melancolía. El fotógrafo capta el instante, y esa es la placa que selecciona de entre tan extraordinario material. Contra la opinión general. 

jueves, 11 de junio de 2015

Entre el cielo y el subsuelo

Richard Avedon. Italia. Circa 1945.


En su afán por documentar la realidad propia, algunos fotógrafos han llegado al cielo y al averno sin necesidad de recurrir a los servicios de Virgilio para que les guiara. 
Richard Avedon encontró al joven portero del Edén, y David Campany descubrió el Infierno en una gasolinera, bien rotulado y con precisas cotas de profundidad.
David Campany. Gasolinera.


Ensanchando los márgenes.