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Montaña portátil en el escaparate de Castroviejo Librero. Logroño. 09.2024. Foto de F.G. |
Entre las múltiples maneras de practicar el aprecio por las montañas hay una especialmente hermosa y al alcance de cualquiera: en China (y por extensión de la doctrina de Confucio también en Corea y Japón) se valoran mucho las llamadas "rocas de los eruditos" o Gongshi, conocidas también como "rocas esculturales", moldeadas natural o artificialmente e instaladas frecuentemente en los jardines domésticos. |
Gongshi del S.XIX del Museo Kröller-Muller. |
Muy variadas, buscan la singularidad en sus colores, formas, textura y marcas, y los que las celebran añaden a esas cualidades aspectos simbólicos ligados a valores espirituales o evocadores de su interés. Frecuentemente se colocan sobre pedestales de madera tallados para acoger adecuadamente las características de la base de la piedra elegida.
F.G. Montaña portátil. Amalgama de objetos encontrados. 2021.
La Montaña portátil que presento ahora en el escaparate de Castroviejo Librero como entrega número cuarenta y nueve de mi exposición a la altura de los ojos y a pie de calle forma parte de una colección que voy construyendo con piedras "que me miran" (bien sabes, querido visitante, que, como le recordaba Franz Hessel a su amigo Walter Benjamin,"sólo vemos lo que nos mira") y por su cualidad de humilde canto rodado procedente de una cuenca fluvial muy venida a menos describo como "amalgama" más que como ensamblaje, que sería la forma habitual de llamarlo en las prácticas artísticas.
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F.G. Montaña portátil. 2021. |
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F.G. Montaña portátil. 2021. |
Tan hermosa como la peña elegida es la rotunda base dentada sobre la que arraiga y que la equilibra, la protege y recuerda al descreído devoto que todo está relacionado con todo y que la armonía dependerá de la coordinación dinámica de los intereses de las partes en presencia. Mi "rolling stone" portátil sienta cabeza acompañada en este bolo por un conjunto de tres hermosos libros de fotógrafos con miradas y devociones singulares, bien diferenciadas (Yasuhiro Ishimoto, el más americano de los fotógrafos japoneses y el más japonés de los americanos; Cristina de Middel, siempre tan personal, a menudo tan sorprendente; y la surcoreana Kyunghee Lee, tan sensible al retrato de la naturaleza, y en esta ocasión a la fugacidad de los pájaros) y una novela de aventuras de René Daumal titulada muy apropiadamente El Monte Análogo, "aventuras alpinas no euclidianas y simbólicamente auténtica", sugerida por Jesús Castroviejo, tan excelente librero como paciente anfitrión. Gracias por todo.
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Montaña portátil en el escaparate de Castroviejo Librero. Logroño. 09.2024. Foto de F.G. |
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