miércoles, 20 de mayo de 2015

Los pozos de Cristina Iglesias

Exposición de Cristina Iglesias en Bodega CVNE. Haro. Fotos de F.G. 9.05.2015. 


El espacio diáfano del antiguo almacén ha sido ocupado por cuatro cubos de apariencia neutra, estática, aunque en su interior bulla, sin cesar, la vida que se manifiesta como leve rumor de agua, origen y principio.
Cuatro catas naturales desde las que abismarse -como si de observatorios privilegiados se tratara- imaginando la construcción del mundo a partir de un magma básico en constante movimiento. Cuatro manifestaciones muy diferentes de una realidad única.

El cauce medio de una cuenca fluvial llena de vegetación y simetría, previsible en las reacciones de su tumultuoso funcionamiento.

La abrasada superficie de un territorio glaciar, informe, mágico, de apariencia orgánica, dominado por los brillantes contrastes que ha suavizado la lija del hielo.

La cavidad insondable de tersa superficie y apariencia viscosa, abismo sujeto a la permanente voluntad de las mareas y a los flujos invisibles e inciertos de corrientes y manantíos.

La sima imprecisa de flora exuberante, con vaga apariencia de trampa, de lugar de irás y no volverás en el que algo se hunde sin posibilidad de recuperación, se pierde sin esperanza, se olvida para siempre en secreto pudridero.


La recreación improbable y fragmentaria, en suma, de una época anterior a que los humanos holláramos el territorio primordial. 


No hay allí más sonido que el de los caudales de agua imprecisos pero generadores -con su repetición- de ritmo, principio básico para calibrar el incansable paso del tiempo. 

Y, envolviéndolo todo, el esencial silencio originario.

Cristina Iglesias
Pozos
Bodega CVNE. Haro.
Abierta hasta el 5.10.2015. 


Otra exposición en Bodega CVNE: Eduardo Chillida.

1 comentario:

  1. Y tus palabras, ahora, afluyendo al cauce de ese pozo, para siempre. Con el mismo ritmo, serenidad y silencio de los orígenes del agua sanguínea.
    Bernardo

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